Posada La Victoria

Calidez es la palabra que define a la Posada y a la atención de sus dueños Pablo y Eli. Siempre atentos a todo! Habitaciones amplias y cómodas con vista al viñedo y hermoso lugar de uso común donde te sirven el desayuno. Buen gusto en todos los detalles.

Hermosa posada atendida por sus dueños Elina y Pablo.Las habitaciones hermosas y muy cómodas. La cama muy cómoda. El baño limpio y cómodo también.Lo más hermoso es la vista de las habitaciones al jardín. Es hermosa, se ven los viñedos, muy muy lindo.Tuve que trabajar en el lugar y el Internet andaba bien, sólo se me cortaba en una videollamada y los dueños me permitieron incluso ir a su casa para solucionar mi problema, super atentos.El desayuno casero, muy rico.Un día cenamos en el lugar y también casero, muy rica comida!Se encuentra a unos km de san rafael, pero es ideal para descansar.Super recomendable!! Volvería mil veces !

Excelente lugar. La atención de sus dueños fue espectacular. Regresaremos por más !!!!

La verdad como experiencia excelente ,la calidez humana sobra es como dicen varios viajeros que estuvieron antes quw nosostrsos...es como estar en casa...tal cual es asi ,no siempre se busca la excelencia en una habitación o una comida...para mi la parte humana es fundamental y eso les sobra...gracias por todo y por la cena que amablemente nos invitaron en vuestra casa ..esperamos volver a verlos y nos juntamos en la cumbre en cba..cariños para toda la flia ,incluye a Rosita y Nube

Muy buena opción de alojamiento, atendida por sus dueños, son super cordiales y atentos. Realmente recomendable y un ambiente muy familiar.

Que belleza de lugar. Una posada que cumple con todo lo que dice.Los anfitriones Pablo y Elina son dos cracks. Te ayudan en todo lo que necesites.Las habitaciones son divinas, con vista a un mini viñedo que tienen. El desayuno muy completo.La verdad estuvimos 3 dias y nos desconectamos mucho. 100% recomendable.

Un lugar muy agradable, muy confortable ya que esta atendido por sus propios dueños con una amabilidad que en pocos lugares se encuentra.Espectacular.

La posada es increíble: la vista, la habitación y baño son grandes, la decoración, los desayunos y budines. Todo excelente. Gracias Eli y Pablo por la atención, sin duda volveríamos a hospedarnos acá.

Una posada excepcional, acogedora, muy bella y que cumple con todos los requisitos de un alojamiento de excelente servicio. Sus dueños Eli y Pablo están siempre atentos a cada detalle, hospitalarios, amigables y te hacen sentir como en su casa. El desayuno es delicioso!!!La comida que sirven, solo en la cena es excepcional, casera y deliciosa. Recomiendo sus pastas caseras y la carne a la olla. La sala de estar con la salamandra, los sillones, los libros y el ventanal a los viñedos le dan el toque único al lugar.Queremos volver pronto, en primavera, para ver los frutales florecidos.¡Gracias Eli, Pablo y familia por los hermosos días que pasamos!