Tolkeyen

El hotel es antiguo pero está bien mantenido. Su mayor virtud es su ubicación privilegiada frente a la bahía y a la vera del río. Si bien está alejado del centro, el servicio de transfer facilita mucho la conexión. Su mayor defecto es el restaurante, con una carta muy limitada y una cocina que está lejos de ser considerada de calidad. El personal es amable y colaboran en todo lo posible con los pasajeros.

Hermoso hotel a orillas del Canal de Beagle. Si bien las habitaciones no son muy modernas, la limpieza nunca faltó.Todos el personal fue muy amables.Cuentan con un restaurant para comer, que si bien no tiene muchas opciones, los platos son muy abundantes, ricos y a buen precio.

Super eficientes, amables, serviciales y empáticos. Todas las excursiones son lindas, pero hay una que está muy buena, se llama Experiencia blanca". Te pasan a buscar temprano por tu alojamiento

El hotel es muy lindo! Las instalaciones cómodas, habitaciones amplias y bien calefaccionadas, con servicio de limpieza diaria, todo impecable. El hotel cuenta con comedor, el desayuno que ofrecen es completo y abundante. Lo más importante para destacar es la atención del personal, super predispuesto para asesorarte y brindarte ayuda. Ofrecen traslados gratuitos al centro en varios horarios y algo que me pareció improtante es que, si tuviste que dejar el hotel pero tu vuelo es de noche, para que aproveches el día te ofrecen guardar el equipaje en una habitación con baño para que puedas volver bañarte y salir.

Posee una vista privilegiada pero alejado del centro. El hotel dispone de transporte gratuito al centro de la ciudad con un cronograma establecido. Además cuenta con un restaurante que posee buenos precios aunque su menú es bastante acotado. Hay agua caliente de cortesía para el mate o té. En cuanto a las habitaciones cumplen las espectativas y su punto negativo es que no posee enchufes, uno termina desconectando algo para poder cargar el celular.

Me encantó la ubicación, si bien está lejos del centro cuenta con traslado. La vista que tiene es increíble frente al canal de Beagle. El desayuno rico no muy variado pero está bien. Las habitaciones cómodas. Muy conforme con la atención. Disfruté la estadía, enamorada de Ushuaia.

Lo busqué por su ubicación y servicios. Habitaciones amplias, ropa de cama y baño limpias, desayuno sencillo pero abundante, buena atención en recepción, comedor y transfer. Las vistas de la bahia Golondrina, las montañas, el aeropuerto y la ciudad a lo lejos, la posibilidad de caminar cerca de la costa, observar aves, admirar los bosques cercanos:todo fue atractivo.

Si bien está un poco alejado del centro, es muy recomendable, además hay un servicio de traslado en varios horarios.Hay una paz increíble y el servicio es un 10 total. Se puede cenar en el hotel, la comida es muy rica y buen precio.Desde la habitaciones se puede ver el canal del Beagle, y las montañas, un hermosa vista!!Sin dudas vamos a volver!!

El hotel tiene una vista impagable, esta lejos del centro pero hay traslados gratis en diferentes horarios así que eso lo hace accesible. El hotel es antiguo en si pero está bien mantenido, los colchones de las habitaciones no son los mejores pero no me molestó por pocos días. La atención del personal deja mucho que desear, muy secos algunos a la hora de dirigirse a los huéspedes. En excepción de Gonzalo, un mozo que nos atendió siempre muy amable. Con respecto al restaurante y al desayuno, no es muy variado pero es rico. Estaría bueno incorporar más opciones. En conclusión: le doy 3 estrellas, lindo lugar pero no es lo mejor en cuanto a atención y servicios.